
El bombardeo de civiles El objetivo no es ir al
rescate de civiles. Todo lo contrario. Se han preseleccionado blancos de ataque
militares y civiles. Las bajas civiles son intencionales. No son el resultado
de "daños colaterales". Hubo reportes confirmando que se han
bombardeado hospitales, aeropuertos civiles y edificios gubernamentales.
Horas después de los ataques aéreos un funcionario de salud del gobierno libio
dijo que "la cifra de muertos por los bombardeos occidentales subió a 64
el domingo después de que fallecieran algunos heridos". El número de
heridos era de alrededor de 150 (Montreal Gazette, Gadhafi hurls defiance as
allied forces strike Libya, 19 de
marzo, 2011).
La cifra de muertos a causa de los bombardeos aéreos y ataques con misiles (24
de marzo) es de alrededor de 100 civiles, según fuentes del gobierno libio (
UN Chief Expects Intl Community to Avoid Civilian
Casualties in Libya, 25 de marzo, 2011).
Desinformación de los mediosLas muertes causadas por los ataques con
misiles y por los bombardeos aéreos de EE.UU.-OTAN se han desmentido o ignorado
como "daños colaterales". Según el Secretario de Relaciones
Exteriores de Gran Bretaña, William Hague, una guerra humanitaria moderna no
produce la muerte de civiles, proposición totalmente absurda:
"Esta operación ha estado haciendo lo que se suponía que debía hacer,
proteger a la población civil de Libia y no hay evidencia confirmada de la
muerte de ningún civil causada por los ataques de la coalición contra el
régimen de Gadafi" (British Foreign Secretary William Hague, No evidence of civilian
casualties in Libya strikes: UK | Reuters, 25 de
marzo, 2011)
El Secretario de Defensa de EE.UU. Robert Gates confirma que: "La
coalición hace un gran esfuerzo para evitar la muerte de civiles y la mayoría
de los ataques van dirigidos a blancos alejados de las áreas pobladas".
El fin de la campaña de desinformación de los medios es encubrir descaradamente
la muerte de civiles. Los reportes de los medios occidentales de las bajas son
extremadamente indirectos. Los misiles Tomahawk y los bombardeos aéreos se
presentan como instrumentos de paz y democracia; que no matan a la población
civil.
Sin esta campaña de desinformación, la legitimidad de las operaciones militares
colapsaría como un mazo de naipes.
Cientos de personas se congregaron en un funeral en Libia, y esto se rotuló
como una acción propagandística de Gadafi. El funeral era falso, según los
reportes occidentales. Se presentó como una "puesta en escena".
De acuerdo con uno de los reportes: "Los hombres rezan por gente que
supuestamente murió en los bombardeos aéreos. Pero no queda claro quienes están
en los féretros" ( Véase Civilian Casualties in Question
at Tripoli Funeral - WSJ.com, 24 de marzo, 2011, In Libya, coffins carry a
mystery, SMH, 26 de marzo, 2011).
Los bombardeos humanitarios y la responsabilidad de proteger
El propósito de estos bombardeos es la destrucción de las instituciones del
país, su base productiva. A esto llaman "bombardeo humanitario". Se
usa como justificación el concepto de "Responsabilidad de proteger".
Las instalaciones generadoras de energía, los puentes, las carreteras, los
hospitales, las estaciones de televisión, los edificios gubernamentales, las
fábricas se designan "blancos estratégicos".
Un reporte (no confirmado) de fuentes libias dice que bombardearon dos
hospitales y una clínica:
"Atacaron los hospitales Al-Tajura y Saladin en Ain Zara. La clínica que
bombardearon se halla cerca de Trípoli, la capital de Libia. No sólo se trata
de edificios civiles, sino que además se hallan alejados de la zona de
combate."
También sufrieron ataques algunos aeropuertos civiles en diferentes partes de
Libia. (Mahdi Darius Nazemroaya, Breaking News: Libyan Hospitals Attacked. Libyan Source:
Three French Jets Downed, Global Research,
19 de marzo, 2011).
En el caso de ataques a hospitales, las bombas "inteligentes"
fueron extremadamente precisas. El Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia
acusó a la coalición militar occidental de llevar adelante una campaña de
bombardeos indiscriminados. (Metro - Russia: Stop indiscriminate
bombing of Libya, March 19, 2011)
Los medios occidentales seguirán sosteniendo sin variaciones que las fuerzas de
Gadafi bombardean los hospitales del país, sin aportar ninguna prueba.
Hay indicios de que los hospitales están incluidos en la lista de objetivos a
atacar. A los aviones canadienses CF-18 les asignaron blancos civiles
específicos. Los pilotos decidieron regresar a la base sin atacar el objetivo
preseleccionado, que fue identificado como un aeropuerto civil. Según los
reportes de prensa, estaba al lado de un hospital: "Dijo Lawson que la
acción no respondió a ningún riesgo para los aviones CF-18 sino que los
pilotos trataron de evitar el daño potencial a civiles o a infraestructuras
importantes como hospitales" (CTV Calgary- Canadian pilots
abort bombing over risk to civilians - CTV News, 23 de
marzo, 2011, énfasis agregado por el autor)
Se ha invitado a la opinión pública a apoyar sin condiciones un nuevo escenario
de guerra en el Norte de África. La llamada comunidad internacional ha logrado
construir un consenso a través de la propaganda mediática.
La "responsabilidad de proteger" ha recibido el apoyo de
organizaciones de la sociedad civil y de las ONG. Muchos sectores de la
izquierda progresista apoyan los bombardeos a Libia como un medio para
conseguir la democracia, sin siquiera analizar la naturaleza y composición de
la rebelión.
Aquellos que se expresan contra la "zona de exclusión aérea"
decretada por EE.UU.-OTAN son catalogados de inmediato como "apologistas
de Gadafi".
El modelo yugoslavo de "bombardeo humanitario"
El bombardeo humanitario es parte de un proceso histórico. Es parte del
planeamiento militar.
La campaña del "bombardeo humanitario" de Libia es un componente
integral de la estrategia militar que consiste en destruir la infraestructura
civil del país. Se ha hecho siguiendo el modelo usado previamente en otros
sitios, incluyendo el bombardeo de Yugoslavia en 1999 y la campaña militar
contra Irak en 2003.
Cuando bombardearon Yugoslavia en 1999, puentes, centrales energéticas,
escuelas y hospitales fueron designados como "blancos legítimos de
ataque" por el Centro Combinado de Operaciones Aéreas (CAOC según sus
siglas en inglés) de la OTAN en Vincenza, Italia, y cuidadosamente
"convalidados antes del lanzamiento del ataque". En Libia se está
aplicando el mismo procedimiento: los objetivos militares y civiles se aprueban
con anticipación. Los pilotos no siempre saben el carácter preciso del
objetivo.
En 1999 el hospital infantil ubicado en el área de la embajada fue el objetivo
de un ataque aéreo. Había sido identificado por los militares a cargo del plan
como un blanco estratégico.
La OTAN reconoció su autoría pero insistiendo que era para "salvar las
vidas" de los recién nacidos. No bombardearon la sección del hospital
donde se hallaban los bebés sino que atacaron la parte adonde estaban los
generadores eléctricos, lo que interrumpió el suministro eléctrico de las
incubadoras. Esto significó que todo el hospital quedó inhabilitado y muchos
niños murieron.
Visité el hospital un año después del bombardeo de junio de 2002 y vi con mis
propios ojos lo que habían hecho con la mayor precisión. Estos son crímenes de
guerra cometidos con la tecnología militar más avanzada, con las llamadas
"bombas inteligentes".
En Yugoslavia, la población civil fue el objetivo de los ataques: hospitales,
aeropuertos, edificios gubernamentales, fábricas, infraestructura, sin
mencionar las iglesias del siglo XVII y los sitios históricos y culturales que
forman parte del patrimonio del país.
El diabólico propósito de desencadenar una catástrofe en el medio ambiente de
la cuenca del río Danubio figuraba en el plan. La OTAN atacó la planta
petroquímica de Pancevo, cerca de Belgrado. El objetivo no era solamente
destruir la planta sino también desencadenar una catástrofe ambiental. ¿Cómo lo
hicieron?
"Un generador térmico de imágenes desde un satélite espía o un avión puede
detectar radiación infrarroja emitida desde cualquier objeto que se encuentre
en la planta petroquímica y convierte esa lectura en una imagen de alta
resolución o fotografía... En palabras de un vocero del Pentágono, "toma
una fotografía desde una gran altitud, la emite a un receptor, en Estados
Unidos, donde se analiza rápidamente". Y desde allí, "la información
de los blancos correctos" se retransmite a la CAOC en Vincenza, que a su
vez la envía a la gente en la cabina".
Las "bombas inteligentes" no son tontas, van adonde les dicen
que vayan. La OTAN ha identificado detalladamente los contenedores, tanques y
depósitos que contienen materiales tóxicos. De acuerdo con lo manifestado por
el director de la planta petroquímica, la OTAN no hizo blanco en ningún
contenedor vacío: "Esto no fue accidental; escogieron como blancos los
contenedores llenos y los químicos se derramaron en el canal que desemboca en
el Danubio..." Cuando las "bombas inteligentes" dieron en sus
blancos letales en Pancevo, liberaron fluidos y gases tóxicos en la atmósfera,
el agua y el suelo. "Hubo una fuga de más de mil toneladas de bicloruro de
etileno del complejo petroquímico de Poncevo hacia el Danubio (a través del
canal que comunica la planta con el río). También se derramaron más de mil
toneladas de hidróxido de sodio. Y cerca de mil toneladas de cloruro de
hidrógeno pasaron de Pancevo al río Danubio." (Michel Chossudovsky, NATO
Willfully Triggered an Environmental Catastrophe In Yugoslavia, Global Research, 11 de abril, 2004)