FELIPE HERRERA

Por:
Pedro Godoy

Publicado el 01/08/2011

Tanto Andrés Soliz Rada como Julio Fernández Baraibar rescatan del

 olvido el genio y la figura de Felipe Herrera. Este chileno notable

 milita en el PSP conglomerado que apoya en 1952 la postulación

 presidencial del general Carlos Ibáñez del Campo. Será su ministro de

 Hacienda y, al calor del ABC propuesto por Perón, viaja a Buenos Aires

 elaborando el Tratado que liga económicamente Chile y Argentina. Será

 siempre admirador del fundador del justicialismo. Ahora se recuerda

 que, en reunión de los Ministros de Hacienda de la UNASUR efectuado en

 agosto del año pasado, se elogia su pionera labor desde el BID. Las

 agencias de noticias -al menos en Chile- ocultaron aquel homenaje que

 permite realzar su legado de estadista y su obra de ideólogo..

 

 Lo combate con furia el PC, lo excluye de toda función pública el

 régimen militar y es olvidado por la Concertación. Vivirá sus últimos

 años en el aislamiento. Lo aprovecha para continuar publicando obras

 cuyo eje es la tesis de la reintegración de la nación deshecha que es

 Iberoamérica. Nuestro vínculo comienza cuando apadrina -al interior

 de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional,

 específicamente en la Escuela de Periodismo- el Curso Electivo de

 Integración de América Latina CEIAL. Lo instituye, en 1965 el

 infrascrito. No es todo, en 1982 contribuye a fundar el Centro de

 Estudios Chilenos CEDECH. Respalda la postulación del

 desenclaustramiento de Bolivia, apoya a Argentina en la guerra de

 Malvinas y aplaude, sin reservas, la paz vaticana respecto al Beagle.

 

 Cada 17 de junio -en su residencia de Avenida El Cerro- con motivo

 de su cumpleaño se congregaron, aun bajo la dictadura,

 quienes lo apreciabamos y coincidiamos con la filosofía bolivariana.

 El amable ritual dura hasta 1996. El 17 de septiembre de aquel año

 fallece a los 74 años quien siempre nos animara en las tareas

 académicas -donde su libro "Nacionalismo latinoamericano" es texto

 oficial- y luego fuera asesor permanente del Centro de Estudios Chilenos

 CEDECH. Me corresponde despedir sus restos en el Parque del Recuerdo.

 Me acompaña en la triste tarea el entonces Presidente del BID Dr.

 Enrique Iglesias. La ausencia de la Concertación es deplorable. Hoy

 Soliz Rada, Fernández Baraibar así como la UNASUR comienzan la

 tarea de rehabilitar a este ilustre gladiador que se empeñara en la

 guerra por la unidad del "pueblo continente".

 

 

 Prof.Pedro Godoy P.

 Centro de Estudios Chilenos CEDECH

 [email protected].

 www.premionacionaldeeducacion.blogspot.com