HAITI Y AMERICA LATINA: UN ENCUENTRO URGENTE”
Un Encuentro de economistas y dirigentes sociales denuncia la situación
y requieren el retiro de las tropas de NNUU de Haití

Por:
Minga Informativa

Publicado el 01/12/2012

El 8° Coloquio Internacional anual de la Sociedad Latinoamericana de
Economía Política (SEPLA) fue llevado a cabo del 11 al 14 ede
noviembre de 2012 en la ciudad Puerto Príncipe bajo el lema “Haití y
América latina: un encuentro urgente y necesario”.

El evento centró la atención en el largo silencio y cuarentena que ha
venido sufriendo históricamente y sufre hoy el pueblo haitiano desde
su gesta en el siglo XIX en contra de la esclavitud, a los momentos de
separación, de divorcio, de malentendidos en el siglo XX y a la
tragedia de la vergonzosa y dolorosa ocupación del suelo haitiano en
la actualidad, ya en pleno siglo XXI, por fuerzas militares
extranjeras bajo el paraguas de Naciones Unidas, la denominada
MINUSTAH, con la presencia central de tropas de América Latina.

A lo largo de tres días una centena de economistas y representantes de
movimientos populares de Argentina, Brasil, España, Haití, Perú y
Uruguay debatieron los elementos clave de coyuntura mundial y
regional, denunciando nuevas ofensivas del capital contra del trabajo,
la privatización y reprimarización de las economías dependientes y el
gigantesco apoyo a libro cerrado a entidades financieras y grupos de
poder que son parte responsable de la crisis internacional.

El IX Coloquio Internacional anual de la SEPLA hizo un repaso de la
tendencia creciente de resistencia popular, la construcción de nuevos
sujetos históricos nutridos por el ciclo de las movilizaciones
sociales y el soplo poderoso de las experiencias alternativas y de los
combates por la soberanía alimenticia y energética, la defensa de la
agricultura familiar, la reforma agraria, la consolidación de las
conquistas feministas, las cooperativas socialistas, las experiencias
comunitarias y autogestionadas, las empresas recuperadas por los
trabajadores.

En un documento final, denominado “Declaración de Haití”
(http://www.movimientos.org/show_text.php3?key=21875), se hace
referencia a aspectos centrales de la situación haitiana como ser: “la
aplicación de planes de ajuste estructural para la economía haitiana
desde la década del 80 hasta hoy, destruyeron una gran parte del
potencial productivo de su economía campesina, reforzaron la
dependencia del sistema político llevándolo hasta una tutela de facto,
pusieron en marcha un capitalismo raquítico dotado de un fuerte
potencial destructivo e imponiendo una violencia permanente sobre las
clases populares, sobreexplotadas, excluidas y marginalizadas”.
Asimismo, se denuncia que “las transferencias masivas de ingresos
hacia las clases dominantes explican la situación de pauperización
afectando casi el 80% de la población. El terrible terremoto del 12 de
enero del 2010 ha empeorado la crisis estructural destruyendo 120 %
del PIB y ofreció un espacio favorable a nuevas ofensivas del capital
transnacional acelerando la corrupción y las tendencias a una
gangsterización de la economía gangrenada por el trafico de drogas y
los mecanismos del lavado de dinero en un contexto dominado por la
profundización de las reformas neoliberales que tratan de esconderse
detrás de una masiva propaganda articulada alrededor del eslogan
“Haití es abierta a los negocios”.

El manifiesto pone de relieve “el tratamiento inhumano dado a la
epidemia de cólera introducida en Haití, según todos los informes de
expertos, por las tropas de ONU quienes, gastando más de 600 millones
de dólares anualmente, no movilizaron fondos significativos para
salvar más vidas y erradicar la epidemia” y saludó la memoria de las
7626 personas muertas desde octubre de 2011 por esta epidemia y las
607.000 personas afectadas por una enfermedad que no existía en este
país. Expresó su pleno apoyo a las reivindicaciones presentadas por
numerosos sectores de Haití exigiendo “justicia y reparaciones para
las familias de las víctimas y una inversión inmediata del sistema de
Naciones Unidas permitiendo asegurar un acceso adecuado al agua
potable y a los servicios de saneamiento para el conjunto de la
población haitiana”.

El pronunciamiento refiere explícitamente “la denuncia, el rechazo y
la condena a la la ocupación por las tropas de la MINUSTAH” y pide a
los pueblos y a los gobiernos latinoamericanos cambiar radicalmente
sus políticas hacia Haití retirando sus tropas incluidas en las
fuerzas de las Naciones Unidas e instaurando de forma urgente una
nueva política con Haití que “priorice la cooperación económica,
social, cultural, tecnológica y científica en una lógica de
integración alternativa y complementaria”. Por su parte, como ejemplo
alternativo de respuestas activas y solidarias, pondera “la tenacidad
de los movimientos y redes como Jubileo Sur América, Jubileo Sur
Brasil, Conlutas, el MST de Brasil y Vía Campesina y tantos otros que
siempre mantuvieron la cuestión de la lucha contra la MINUSTAH en sus
prioridades y lograron construir formas activas y fructíferas de
solidaridad con el pueblo haitiano”.

La “Declaración de Haití” expresa la plena solidaridad con el pueblo
haitiano en su bregar por “reconquistar la soberanía total y absoluta
sobre su territorio, la búsqueda de la independencia económica y
política de todo poder extranjero y el compromiso para desarrollar
nuevos enlaces con los movimientos sociales ”.

Puerto Príncipe, Haití, Noviembre de 2013.

Para mayor información y el envío de adhesiones a la “Declaración de
Haití” (http://www.movimientos.org/show_text.php3?key=21875)