LAS BASES DE LA UNIDAD NACIONAL PARA LA LIBERACION Y LA
INTEGRACION LATINOAMERICANA

Por:
Eduardo Paz Rada*

Publicado el 01/01/2013

El desplazamiento y retroceso del discurso y las prácticas que peligrosamente se orientaban a la desintegración nacional por la vía de la autonomías oligárquicas o del radicalismo indigenista-oenegista, vigente en los pasados años, y la adopción de decisiones políticas nacionales y de unidad de Bolivia acompañadas de políticas de integración territorial, cultural y social; junto a la reafirmación del respaldo de los sectores populares al gobierno de Evo Morales han sido las características fundamentales del año 2013.

 

Si a esto se agregan, por una parte, el importante crecimiento económico de algo más del 5.5%, basado en la activación del mercado interno, el alto precio de las materias primas de exportación, la reducción de la extrema pobreza del 38% de 2005 a 20% en 2013 y la redistribución de los excedentes económicos hacia distintos sectores de la población y, por otra, la desarticulada oposición política, electoral y mediática que trata de reciclarse a través de Unidad Nacional (UN), el Movimiento Sin Miedo (MSM) y el Movimiento Democrático Social (MDS) que no logran opacar a Morales, el posicionamiento oficialista en 2013 resulta efectivo.

 

Sin embargo, el proceso de industrialización, no solamente de los recursos mineros y gasíferos, sino de la manufactura textil a gran escala y el fomento de la agricultura campesina y comunitaria, con medidas proteccionistas, así como la diversificación masiva del consumo de gas dentro del país, se encuentran retrasados y se mantiene el tradicional modelo primario-exportador que, en la perspectiva, mantiene las condiciones de dependencia y dominación favorable a los centros metropolitanos capitalistas.

 

POTENCIALES DE LIBERACION

 

Las potencialidades liberadoras del Capitalismo del Estado y el fortalecimiento del Estado Nacional, en conjunción con los procesos de unidad e integración en América Latina y el Caribe, se convierten en los pilares fundamentales de una estrategia que efectivamente apunte a los objetivos presentados en la Agenda Patriótica 2025 que durante este año fue destacada por la autoridades gubernamentales en el horizonte de conseguir la plena soberanía económica y política ampliada a la ciencia y tecnología, la alimentación, los servicios básicos, el medio ambiente y las finanzas.

 

De todas maneras la excesiva dependencia de la producción y exportación de gas a Brasil y Argentina por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en sociedad con las transnacionales hidrocarburíferas Petrobrás de Brasil, Repsol de España, BG de Inglaterra y Total de Francia hace vulnerable el modelo de sustentación endógena de recursos económicos y financieros.

 

Por otra parte, los resultados del Censo de Población y Vivienda marcaron también una parte importante del debate nacional, en primer lugar por los variados cuestionamientos a su validez técnica y a la imposibilidad de contar con un cuadro completo para realizar proyecciones y desarrollar las políticas correspondientes, en segundo lugar por las implicancias que se presentan tanto en la distribución de los recursos económicos y los escaños parlamentarios entre los departamentos y municipios y, finalmente, por la reducción de quienes se identifican con algún pueblo originario o indígena de Bolivia.

 

En este aspecto el Censo muestra que el 40% por ciento se identifica como miembro de un pueblo indígena, cuando el Censo de 2001 daba el dato de un porcentaje superior el 60%, situación que generó  debate acerca de las características de la mayoría mestiza de Bolivia que es, junto a la población indígena, la base del proyecto indo-mestizo nacional y popular.  

 

APOYOS Y CONFLICTOS SOCIALES

 

Los bastiones sociales que apoyan y consolidan a Evo Morales continúan siendo la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), la Confederación de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa  (CMCBS), la Confederación de Trabajadores Interculturales de Bolivia (CSTIB) y la Confederación Nacional de Juntas Vecinales (CONALJUVE) que se mantienen fieles y representan el potencial más importante en la perspectiva de las elecciones del 2014.

 

En el ámbito de los sindicatos de trabajadores asalariados y la Central Obrera Boliviana (COB), el asunto que marcó el periodo fue la inicial determinación de la COB y la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), encabezada por el poderoso Sindicato de Huanuni, de formar el Partido de los Trabajadores (PT) con el objetivo de enfrentar al gobierno e impulsar una candidatura propia en las elecciones de 2014. Sin embargo, en noviembre pasado, un Ampliado Nacional de la COB y los nuevos dirigentes de Huanuni determinaron dejar de lado el proyecto del PT y pasaron a apoyar directamente al MAS en la proyección electoral.

 

Si bien las confrontaciones del gobierno con las organizaciones indígenas del oriente a través de la Central Indígena del Oriente Boliviano (CIDOB) y del occidente con el Consejo de Ayllus y Markas del Qollasuyo (CONAMAQ) han marcado el panorama social, las mismas no han tenido el alcance que tuvieron en años anteriores con el conflicto del Territorio Indígena Parque Nacional Isidoro-Securé (TIPNIS) que se presentó como una señal de división en las organizaciones del Pacto de Unidad que sostienen al gobierno.

 

ALIANZAS CON TRABAJADORES Y EMPRESARIOS

 

Los niveles de conflicto entre sectores y regiones también disminuyeron en relación a los periodos anteriores, aunque la tensión entre trabajadores mineros asalariados y trabajadores de las cooperativas mineras se mantuvieron ante la ausencia de una política más definida en el sector, el mismo que tiene en las grandes transnacionales como la Sumitomo de Japón, la Glencore de Suiza y la Coeur DAlene de Estados Unidos a sus principales representantes. En los últimos meses se informó que está en proceso la elaboración de un nuevo Código Minero que permitirá conocer las perspectivas que tiene el gobierno en este rubro.

 

Un aspecto más que llamativo fue el acercamiento que hizo el gobierno con los empresarios de Santa Cruz, especialmente los agroindustriales y terratenientes del oriente dedicados a la producción extensiva de soya y con altos niveles de exportación y ganancias, quienes en los años precedentes se habían convertido en la base de la radical oposición a Evo Morales de los Comités Cívicos que inclusive planteaban la separación de una parte del territorio nacional y pusieron al país al borde de una guerra civil en 2008.

 

Con los dirigentes de la Asociación de Bancos (ASOBAN) también se avanzó en la negociación para aprobar una nueva Ley de Servicios Financieros que pretende una mayor fiscalización gubernamental y la democratización de los créditos hacia sectores más amplios de la población. Habrá que considerar que durante los años de gobierno del MAS el sistema bancario tuvo ganancias superiores a las de cualquier anterior periodo.

 

EL PROCESO DE UNIDAD DE AMERICA LATINA

 

En el campo internacional el proceso de coordinación e integración de los países de América Latina y el Caribe, en el cual Bolivia ha tenido importante rol, con la Alternativa Bolivariana de las Américas (ALBA), la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) se ha desacelerado desde la muerte del Comandante Hugo Chavez y ante el avance del proyecto norteamericano de la Alianza del Pacífico (Chile, Colombia, México y Perú).

 

En ese contexto, durante 2013, las relaciones con Brasil, el país más poderoso de la región, se han visto empañadas por las acciones del Embajador de Planalto en La Paz, Marcel Biato, quien impulsó la huída clandestina desde la sede de su embajada hasta territorio brasileño del senador opositor Roger Pinto, quien se encontraba refugiado ante la posibilidad de su detención por tener juicios pendientes. De igual manera la relación con Chile ha llegado a sus niveles mas bajos debido a la decisión boliviana de recurrir a la Corte de la Haya con la demanda de derechos sobre el Océano Pacífico y a las duras declaraciones tanto del presidente chileno Sebastián Piñera, como del boliviano Evo Morales.

 

La crisis económica y financiera en Europa y Estados Unidos, así como la emergencia y el crecimiento de China, Rusia, India y Brasil ha generado una especie de multipolaridad comercial de Bolivia, con el aumento del comercio y los acuerdos económicos con los países de Asia y con los vecinos de América del Sur, particularmente Brasil, Argentina, Perú y Paraguay, en la perspectiva de participar en la construcción de corredores bioceánicos. En esa medida adquieren importancia los convenios con Gasprom de Rusia para realizar proyectos en el campo de los hidrocarburos y con China para poner en órbita el satélite Tupac Katari que mejorará las comunicaciones, los servicios y el acceso tecnológico de la población boliviana.

 

SALIR DE LA DEPENDENCIA

 

En el balance general, Bolivia ha conseguido en 2013 importantes avances económicos y financieros que le permiten fortalecer el papel central del Estado en los procesos de desarrollo y redistribución de los excedentes; al gobierno le ha significado contar con el respaldo social y político de la mayoría de la población, manteniendo una posición nacionalista y antiimperialista abierta a un proceso de liberación nacional y de acercamiento, solidaridad y coordinación con los países que apuntan la perspectiva de la unidad continental y la construcción de la Patria Grande Latinoamericana.

 

El desafío está planteado en términos de ir más allá de la revolución democrática y cultural y avanzar en la mayor politización y organización del pueblo para impulsar y concretar una revolución económica industrial que permita salir de la dependencia exportadora de materias primas y acelerar la plena unidad de la nación boliviana como parte del proceso de liberación nacional y social, que propugna la Izquierda Nacional en Bolivia.