MAR PARA BOLIVIA

Por:
Leonardo Jeffs Castro

Publicado el 01/08/2014

Me sumo a un número difícil de precisar de chilenas y chilenos que estamos de acuerdo en propiciar que el gobierno de nuestro país reinicie, lo más pronto posible,  el diálogo con el gobierno boliviano para una solución a su aspiración de recuperar su cualidad marítima.

En relación con esta temática no tengo inconveniente en postular que desde Chile debemos reconocer que en 1879 las tropas chilenas ocuparon el entonces puerto boliviano de Antofagasta y posteriormente la localidad de Calama sin que hubiera una previa declaración de guerra.

Sin embargo, creo imprescindible que el gobierno boliviano no siga insistiendo que el territorio del Departamento del Litoral boliviano fue arrebatado por Chile, cuando las autoridades bolivianas de la época suscribieron y ratificaron el Tratado de 1904 libremente, como lo reconoce, entre otros el historiador boliviano Roberto Querejazu Calvo en su obra Guano, salitre, sangre.

Una condición para mejorar las relaciones entre nuestros gobiernos y nuestros pueblos es desarrollar no sólo la capacidad crítica. También debemos desarrollar la capacidad autocrítica.

Bolivia y Chile, nuestros gobiernos y pueblos somos responsables de no haber encontrado la forma de solucionar el problema que existe entre nosotros. Sugiero que podamos difundir entre nosotros Oportunidades perdidas. Bolivia y el mar, del diplomático  boliviano Walter Montenegro y Chile y Bolivia ¡Hasta cuándo!  del diplomático chileno Oscar Pinochet de la Barra.

Tenemos un desafío aunque exista el Tratado de 1904, y podamos enfrentar dicho desafío sin modificar el Tratado.

Leonardo Jeffs Castro

Profesor de Estado en Historia y Geografía

Magister en Estudios Internacionales

Doctor en Estudios Americanos, mención en Estudios Internacionales

Profesor Titular de Historia de Chile y América, Universidad de Valparaíso

 

Valparaíso, 26 de julio de 2014