ARTIGAS VUELVE


                                "los americanos del sur, están dispuestos a defender su patria"

                                                                                         José Artigas

                                                                       Proclama de Mercedes, 11 de abril de 1811

 

Estimado Hugo Chumbita:

 

Es un gran placer volver a mantenernos en comunicación contigo, luego de que nos conocieras en muy distintas circunstancias, a uno de nosotros en Barcelona, durante el exilio que nos impusieron las últimas dictaduras, y, a otro, más recientemente, en el II Encuentro de Revisionismo Histórico “José Artigas” organizado este año por el “Instituto Dorrego” en la Universidad Nacional de Lanús

Estamos al tanto de la polémica pública que se ha desatado en relación con la creación del Instituto Nacional de Revisionismo Histórico Argentino e Iberoamericano “Manuel Dorrego” y no queremos ser ajenos a este debate que nos concierne enteramente. Por tal motivo hemos decidido que en la primera reunión del año próximo del Consejo Director de la Fundación Vivian Trías, plantearemos la idea de colaborar con el “Instituto Dorrego”, con un objetivo específico: promover la investigación y el esclarecimiento del verdadero significado de las Instrucciones del Año XIII e impulsar, conjuntamente, la conmemoración de su bicentenario, por ser un documento esencial del artiguismo que constituye, a nuestro modesto entender, una declaratoria de la independencia rioplatense -anterior en tres años a la de 1816-, una proclama de organización republicana, y es a la vez el primer proyecto de Constitución Federal de las Provincias Unidas del Río de la Plata, de la que formábamos parte, incluyéndose en ellas las Misiones Orientales, hoy riograndenses.

Como la propuesta aún no la hemos planteado en el Consejo Directivo te escribimos adelantándote la idea  para que, si te parece apropiada, también puedas conversar al respecto con los demás integrantes del “Instituto Dorrego”.

Querríamos contribuir a un mejor conocimiento de los orígenes del federalismo en la Cuenca del Plata -desde la adhesión de Artigas al movimiento juntista en tiempos de la Junta Grande que incorporó a los diputados del interior- y su vigencia esencial en un tiempo como el actual, decisivo para la unidad de nuestros pueblos. Es nuestra intención lograr no solamente la cooperación en este proyecto entre la Fundación Vivian Trías y el “Instituto Dorrego”, sino también la colaboración de personalidades e instituciones brasileñas, paraguayas, bolivianas y de otras partes de América Latina.

Necesitamos, estimado Hugo, una revolución cultural suramericana para la que, como decía Vivian Trías: “el artiguismo…(no sea) un recuerdo, sino un programa”. Y agregaba: “La Patria Grande era su sueño. El artiguismo ha trascendido el significado de un ciclo en la historia rioplatense. A través del tiempo, ha ido adquiriendo la jerarquía de una concepción programática para el futuro”.

La polémica desatada en torno al” Instituto Dorrego” es, al fin de cuentas, la continuación de los debates ya centenarios sobre nuestra historia. Aún hoy es dominante la vieja visión oficial, mitrista y oligárquica del pasado. Y la consecuencia peor de la interpretación mitrista y “unitaria” es la persistente balcanización del conocimiento sobre  nosotros mismos. Implica la supervivencia de miradas fragmentadas que dificultan la autoconciencia de que somos una gran Patria suramericana y latinoamericana-caribeña inconclusa.  

Necesitamos comprender nuestras raíces uniendo lo que la diplomacia inglesa separó tanto en los hechos como en las conciencias.

No es extraño que algunos de los debates actuales sobre nuestro pasado evidencien la voluntad de abusar del relato histórico para mantenernos divididos y sometidos.

Cuando el ex presidente uruguayo Jorge Batlle sostiene que el legado esencial de Artigas sería el Tratado de Comercio con Gran Bretaña (omitiendo mencionar que la corona británica rechazó ese acuerdo), se está dando a entender que Artigas en lugar de haber sido uno de los padres de la Patria Grande -quien formuló el programa del federalismo rioplatense desde bases populares, planeó llevar sus ejércitos al Perú y mantuvo correspondencia con Bolívar y San Martín-, habría sido en cambio el precursor del TLC con Estados Unidos, que algunos enemigos del MERCOSUR y de la unidad latinoamericana con terquedad siguen impulsando, a pesar de la honda crisis financiera y económica que desde el 2008 sacude a Estados Unidos y Europa.

Un sentido semejante tiene la intervención del ex presidente uruguayo Julio Mª. Sanguinetti en la polémica sobre el “Instituto Dorrego”, como se evidencia en la descalificación que hace de Rosas y en la reivindicación de Caseros, omitiendo toda mención a la intervención y agresión imperial de las flotas de guerra inglesa y francesa. Es necesario recordar lo que sobre Rosas decía nuestro Vivian Trías: “La defensa intransigente, porfiada, de la soberanía nacional y del derecho de los pueblos americanos a disponer de su destino frente a las intervenciones voraces de los imperialismos europeos, es la culminación del rosismo”. Y profundizaba el concepto afirmando: “Rosas es una fase en la larga lucha de América Latina por la Patria Grande y, por ende, se incorpora al futuro que nuestros pueblos todavía esperan”. Queda claro que en el artículo del ex mandatario Sanguinetti, a pesar de su pretendida “objetividad”, se está ante la repetición de la vieja monserga mitrista y “unitaria”, pero esencialmente divisionista y anti-federal, balcanizadora de nuestra América, en las antípodas del artiguismo y “su sistema”. 

"Todo historiador es filósofo" como escribió Alberto Methol Ferré en su obra "La Dialética Hombre - Naturaleza", y una de las falsificaciones más perniciosas de los investigadores presuntamente impolutos es la ocultación de la filosofía de la historia que implícitamente asumen en sus textos. Como a la vez esa concepción subyacente está al servicio consciente o inconsciente del mantenimiento de la disgregación de nuestros pueblos, es necesario llevar a la luz el debate discutiendo los datos y documentos comprobables, pero a la vez exponiendo los presupuestos filosóficos en que se apoya la interpretación de lo fáctico.

Mientras te escribimos estas líneas se ha desatado una polémica por la justa y digna decisión del gobierno uruguayo de prohibir el acceso al puerto de Montevideo de los barcos con la bandera del enclave colonial británico en las Malvinas. Postura que  ha dado lugar a una declaración de solidaridad del “Instituto Dorrego” con el actual gobierno uruguayo del presidente José Mujica. Hoy como “americanos del sur”, al decir de Artigas, nos sentimos orgullosos de que nuestro gobierno impida el ingreso al puerto de Montevideo de buques con la bandera colonial de las mal llamadas Falkland (es decir de las Malvinas). No nos intimidan las presiones británicas, ni menos aún nos preocupa la oposición a la decisión soberana de nuestro gobierno por parte de algunos políticos uruguayos como el ex presidente uruguayo Luís A. Lacalle. A la vez aguardamos esperanzados que los demás gobiernos latinoamericanos en conjunto tomen una decisión compartida que limite real y eficazmente el comercio entre los puertos latinoamericanos y las Malvinas, mientras subsista la ocupación colonial británica.

Nos mantendremos en comunicación contigo y los demás miembros de la institución, para tratar de concretar el proyecto de cooperación antes mencionado entre la Fundación Vivian Trías y el “Instituto Dorrego”, una vez que el Consejo Director de la Fundación se reúna y resuelva sobre la propuesta.

Te hacemos llegar nuestros saludos plenos de esperanza, a pesar de todos los contratiempos, sinsabores y dolores con los que la vida nos golpea cada día, porque sabemos como decía Carlos Quijano que “la patria grande ha tenido una conmovedora tenacidad. Nadie ha podido borrarla de Nuestra América. Ha sido nuestro perdido bien y nuestra tierra prometida”. Que así sea, y es nuestra convicción que así será. 

 

José E. Díaz

Presidente de la Fundación Vivian Trías

      

Luis Vignolo

Coordinador del Espacio Methol de la Fundación Vivian Trías