El peor de los fantasmas para la actual oposición política boliviana parece haber llegado. Se inició deslumbrante ante sus ojos la mayor pesadilla y sus representantes han empezado a desesperarse. ¿Más parlamentarios y concejales propios se pasaron a las filas del oficialismo? No. ¿Les descubrieron pruebas de esas actividades oscuras que quieren que el tiempo borre y la gente ignore por siempre? Tampoco.

¿Se aceleran las decenas de procesos minuciosamente trabajados desde el Ministerio de Transparencia y agilizados en la Fiscalía? Nada. ¿Ha surgido un candidato “outsider” capaz de conquistar a las masas y plantarle cara a Evo? Menos.

Sucede algo realmente mucho más preocupante para los opositores al Movimiento Al Socialismo (MAS). Es un fenómeno tan crítico que dos senadores de Convergencia Nacional (CN), Mauricio Muñoz y Marcelo Antezana, decidieron lanzar “denuncias” en la Voz de América (VOA). Nada menos que la radioemisora estatal número 1 de los EEUU retransmitió una versión cacofónica de libros como “Ciudadano X” o “Evadas”. Seguramente, antes de la entrevista, los senadores releyeron y memorizaron esos textos a manera de manual práctico.

Bolivia ha dado “prioridad al relacionamiento internacional ideológico político con naciones como Irán, Corea del Norte, Siria, Venezuela y Cuba”, dijo a la VOA Muñoz. La emisora subrayó además: “A pesar de que no hay pruebas sobre este extremo, ´la presencia de iraníes en Bolivia sí existe y en un buen número´, señaló Marcelo Antezana, senador boliviano del partido de Convergencia Nacional”.

 ¿A qué santo tanta agitación para repetir acusaciones ya lanzadas en 2009? Pero, los senadores sólo antecedieron a otro político opositor angustiado. De pronto, y nada menos que en Washington, a don Manfred Reyes Villa le vino candidatitis aguda. Un grupo de adulones lo proclamó, a dos años de la etapa preelectoral y cuando el Gobierno no ha llegado ni a la mitad de su gestión. Claro, su mensaje más parecía orientarse a lo bien que se porta en EEUU, los buenas amistades que tiene, cómo invierte allá, etc. Algo así como un desesperado “no se olviden de mí, no me ignoren, estoy cerca de ustedes”.

En medio de su campaña permanente don Samuel Doria también ha introducido mensajes con dirección norte. Ha acentuado especialmente su crítica a la falta de seguridad para las inversiones privadas. También resulta extraño (¿con miedo?) el silencio abrupto en el que ingresó don Juan del Granado. Sin duda, también han visto al mayor fantasma opositor.

Se trata de un fantasma que no llegó con carcajadas, pero sí con sonrisas. Por ejemplo, las sonrisas del subsecretario adjunto de Estado de los EEUU, Kevin Whitaker y de la ministra boliviana de Planificación, Viviana Caro. También las sonrisas de la subsecretaria de Estado de EEUU para asuntos globales, María Otero, y el vicecanciller boliviano, Juan Carlos Alurralde, se sumaron a ese espectro.

Un espectro que fue creciendo ya desde hace dos o tres meses. Hubo sonrisas y abrazos con los representantes de las grandes transnacionales petroleras. Se multiplicaron los piropos con las cámaras empresariales del oriente y la confederación de empresarios bolivianos nada menos que en plena cumbre masista. Aquella cumbre estaba orientada a cimentar la nueva agenda nacional.

Ni cómo olvidar que se ratificaron promesas de amor con la banca y la minería. En medio de tanto cariño, ¿habrá sido tan accidental el acercamiento con el MNR beniano? ¿Y fue sólo casual coincidencia la salida del gabinete de los ministros de vieja y consecuente línea izquierdista?

Y el fantasma también ha borrado del discurso (o por lo menos las minimizó) las palabras Irán, Cuba, ALBA, socialismo, antiimperialismo…Hasta ha impuesto sorpresivas distancias con Rusia. El fantasma llega además con la bienvenida a la ayuda antidrogas acompañada de la banda del séptimo de caballería.

Todo eso, al parecer, ha despertado el terror en filas opositoras. Si fantasma o realidad, el tiempo lo dirá. Claro, si el MAS se entiende con el tío SAM, sus socios y sus socias, ¿qué opositor, como los actuales, podrá contra el MAS?