En el Caribe, frente a Venezuela, están las Antillas Holandesas. Las integran tres islas Aruba, Bonaire y Curazao ABC. Son pequeñas en superficie, pero ricas en petróleo y testimonios de la piratería que ejerciera Holanda en el área. El pequeño archipiélago dependió hasta 1975  de la Guayana Holandesa. Ese año ésta se convierte en República de Surinam con medio millón de habitantes. En Aruba hay una especie de autogobierno tutelado por Amsterdam. Se ha detectado que allí complotan los adversarios del Presidente Chávez. Sin embargo, informo que, en más de un viaje a Caracas, me desconcierta el desinterés venezolano por recuperar esos tres enclaves insulares equivalentes allá a Malvinas. Caracas -en el momento de conmemorarse el  natalicio Nº 200 de Bolívar- hacía gárgaras con la tesis de la Patria Grande. Sin embargo, en nadie se encuentra eco. Ni en el mundo académico ni en el sindical. Tampoco en la derecha ni en la izquierda. La sola iniciativa de recuperarlos cae en el  vacio.
 
Este dato  es invitación a meditar en orden la hipnosis que genera´Europa a dos centurias de la Independencia. El tema es desdeñado en Venezuela. Se alega eso si por asuntos limítrofes con Colombia. Hay un fenómeno de fatalismo y deslumbramiento en el alma suramericana que conduce a exhibir un mapa con tres Guayanas que son colonias. ¿Cómo es posible que Brasil ducho en tragarse el Acre de Bolivia y convertir en provincia Cisplatina a Uruguay nunca intenta desalojar a los europeos de esas factorías que le bloquean el horizonte caribeño ¿Qué geopolítica maneja Itamarati y las FFAA cariocas que jamás las reivindican? Entonces la apatía venezolana que describo equivale al desinterés brasilero. Se despotrica contra la España de la Colonia y festeja la emancipación, pero  los tres quistes coloniales no producen ni cosquilla.  En la prensa ningún enjuiciamiento. Menos en los parlamentos. Nuestras cancillerías callan. Están manejadas por  retoños de euroinmigrantes o "gente linda" inclinadas reverentes ante París, Londres y Amsterdam.
 
En Argentina hubo quienes gasolineaban la guerra contra Chile por el litigio austral, pero juzgan una locura la epopeya del 2 de abril de 1982. Enfrentarse con chilenos -esos ordinarios "chilotes"- si, pero recuperar Orcadas, Sandwich y Malvinas eso ¡no! El repliegue de la campaña descolonizadora explican esos cipayos se debe a que los europeos son superiores. Nuestro gobierno militar y también la oposición entonces en la semiclandestinidad apoyan al Reino Unido. El general Matthei  confiesa el apoyo a Londres con el argumento:"el enemigo de mi enemigo es mi amigo". No única voz proargentina es la de CEDECH. Por eso invito a los lectores que contemplen el mapa suramericano y -a propósito del Bicentenario- reflexionen sobre las hondas raíces culturales de la supervivencia de la dependencia externa. De modo muy específico, es estratégico investigar el por qué de nuestra esterilidad para generar una geopolítica criolla.. La apatía venezolana por aquel archipiélago y el desinterés brasilero por asomarse al Caribe son óptimas motivaciones.
 

 

 CH-B-P: LA DISCORDIA ANDINA
 
Si hay tres pueblos con raíz, sustancia y problemática comunes son Chile, Bolivia y Perú. Sin embargo, mascan el  triunfalismo los chilenos, el rencor los bolivianos y el revanchismo  los peruanos. Los tres "ismos" impiden la complementación que supone sepultar el hacha de guerra y fumar la pipa de la paz. El alma de alumnos y conscriptos -futuros ciudadanos- se envenena de patriotería en cada país. En esa esfera no hay inocentes. Los círculos dirigentes -con intensidades distintas y en momentos diferentes- estimulan ese clima de recíproca desconfianza. Las tres repúblicas,  en el siglo XXI, optan por obsoletas estrategias del XIX. Una, la "paz armada" y la otra, la "diplomacia secreta". Las tres cancillerías creen descubrir el hilo negro recurriendo a estos mecanismos empobrecedores del erario fiscal e intoxicadores del alma colectiva. Lo curioso que, en esta esfera, la adscripción doctrinaria de los gobernantes es poco lo que incide en los comportamientos interestatales. Esto es nítido, por ejemplo, en las tensiones registradas entre Asunción y La Paz. Lugo protesta por el armamentismo de Evo. La Moneda hace ofertas de puerto sobre el Pacífico a Bolivia porque está horquillada por ´Torre Tagle en lo atingente a la delimitación marítima. En la Guerra del Cenepa, Santiago -en plena democracia- vende armamento a Ecuador porque una arcaica geopolítica lo juzga "aliado" en la hipótesis de conflicto con Lima. Pinochet afligido por los halcones de la Junta presidida por el general Videla a propósito del Beagle monta el show de Charaña. Ahora nuestro canciller etiqueta de "provocación" llevar la querella de la frontera oceánica con Perú ante la Corte Internacional de La Haya. Hasta ayer lo claro es que de común acuerdo se recurría a esa instancia. El Presidente Lagos esquiva la doctrina Toledo del control pluriestatal del gasto militar y convierte en arsenal el país. Alguien podría preguntarse ¿no son afiliados al PS ese mandatario y su ministra de Defensa y luego Presidenta Michelle Bachelet? Si, en efecto, lo son y esa tienda es un brote -en suelo mapochino- del APRA y Alan García es aprista. Al final este es una "merienda de negros" o "laberinto de Creta" que explicita la condición psicótica de una Latinoamérica tan pobre como confusa. Hacer claridad en medio de la tiniebla no es fácil, pero intentarlo es un deber de los genuinos discípulos de Felipe Herrera, Haya de la Torre, Soliz Rada y Jorge A. Ramos.
 
 

 

ESA  IZQUIERDA DE JUGUETE...
 
Ser de izquierda -al menos en Chile- es una moda que soporta los embates de diversos episodios. De moda se convierte en estereotipo, es decir, en preimagen. Si desagrada la derecha por sus engolados personeros -futres, pijes, pepe patos, paltones, palogruesos, cuicos- con sus apellidos de prosapia -vinosos, porque figuran en las etiquetas de  botellas de vino- el sujeto se matricula en la izquierda. No es un partido, sino más bien una corriente de opinión camaleónica... , por ejemplo, ayer, ultramarxista y hoy neoliberal, ayer antimperialista y ahora pronorteamericana. No obstante, siempre será "in"  levantar el puño y cantar "La Internacional". Eso -como se dice aquí- "viste". Lo otro es ser "facho", "pinochetista", "reaccionario", "retro". Hacer picnic en la otra orilla bebiendo ron con coca cola -en cambio- es ser "moderno" y como eso no basta, "postmoderno" y llenarse la boca con la programacion neurolinguistica, la globalización, la epistemología, el constructivismo, los paradigmas y cuanta palabreja los medios ponen en boga. Contribuyen a añadirse  aditamentos que confieren prestigio, aunque sea imposible explicar en que consiste cada uno. Sin embargo, no hay peligro  en proferirlos porque nadie pregunta su significado para no pecar de ignorante. Lo anotado es la señal que "la noche quedó atrás" con los peligros que implica la  guerrilla y las tinieblas de la "clandesta". Ahora se vive el frívolo disfrute. Lo manifiestan con hilarante cinismo:  "no pudimos cambiar el mundo,  el mundo nos cambió a nosotros"... y a nosotrAs. Se debe anotar la "a". En caso contrario, se atropella al género femenino. Subráyese eso de "genero" nada de hablar de sexo. Esa es una añejez restrictiva, en cambio, el otro vocablo permite que elijamos la condición masculina o femenina como quien escoge una corbata.  
 
Tal "new left" se proclama -al viejo estilo comtiano- "progresista". Tal etiqueta es reflotada por los PPCC, al comenzar la Guerra Fría. Identifica a los "compañeros de ruta" apodados por el adversario "tontos útiles". Después de la caída del Muro de Berlín se emancipa y ahora está en el viraje denominado "renovación". Quienes no la aplauden pasamos a ser "conservadores", "retardatarios", "dinosaurios". La nueva matrícula supone el disfrute solapado de licores y manjares estimados delicatesen. De allí que se les conozca como "wiskhizquierda", "izquierda caviar" o "gauche divine". Matriculan sus retoños en exclusivos colegios privados bilingües. El antimperialismo ya esta en el desván ahora, por lo mismo que son globalizantes, se adscriben al norteamericanismo y a la euromanía. En cierto modo, el paradigma es el señor Infante, personaje del film "Machuca" -funcionario de CEPAL, remunerado en dólares y socialista- cuyo desprecio por la pobreza es manifiesto. La "izquierda de juguete" impulsa el ALCA y se desentiende del MERCOSUR como ayer del ABC propuesto por Perón. Desde la clandestinidad, apoya a Londres en Malvinas porque Galtieri viola los DDHH. No se pierde y sabe que Tony Blair es también "progre" y se "codea" con Ricardo Lagos. Hoy se siente interpretada por Obama. El exmandatario es el gurú del "red set" que comparte el poder con el "jet set". Es el impulsor de un armamentismo descomunal que continúa madame Bachelet ¿Acaso no expresa "muy prisco" y "suelto de cuerpo" el titular de la Cartera de Defensa "hoy tenemos las mejores FFAA de los últimos 100 años".  La furia antiboliviana de Lagos -hecha pùblica en Monterrey- ahora se reemplaza con el forcejeo con Perú. Pronto el turno corresponderá a Argentina. En este rubro, la "progresía" es congruente con la derecha.
 
Esa izquierda es como las ancianas que se hacen lifting, pero la condición secescente se les filtra por los ojos y la arrugosis está allí como las canas debajo de la tintura Sus abuelos,  en la II Guerra Mundial, venden "a precio de huevo" nuestras materias primas al Tio Sam para asegurar así "la victoria de las democracias". Ello no les impide exigir la "apertura del 2º frente" para aliviar la presión de Alemania sobre la Rusia de Stalin mientras, al mismo tiempo, lapidan al GOU y a Perón como "niponazifascistas". Hoy, con Obama, piensa que se acentúa la cooperación con Washington. Es la mismo ilusión rooseveltiana que empujara a convertirse en paladines de los "3 Grandes" (Churchill, Truman y... Stalin) y convencer que, con la derrota del III Reich comenzaba una nueva era. Hoy optan por lo inmediato: hacer negocios para continuar en  la bebilona de whiski y en la comilona de caviar. Desde becas a Harvard o Cambridge a comisiones por adquirir F-16, tanques Leopard, fragatas misileras y otros artilugios bélicos "usados". Suele asociarse para vivir en ghetos apartados y ecológicos tipo Peñalolen. Ello mientras en lo valórico promueve el divorcio y el aborto, es permisiva con la homosexualidad, las drogas blandas, las tribus urbanas  y la pornografía. Argumento: "nada con el cartuchismo" ("no a la mojigatería"). Lo clave es imitar a los países desarrollados. Léase: Europa y EEUU. Suele ocurrir que colisiona con la Iglesia. Poco importa, pues en el baúl conservan como reliquia el vocablo "laico". Sirve de salvavida. En general, posa de "transgresora" y ello genera deleite. Acaso no son sus figuras representativas las que gozan con figurar en la "Vida Social" del diario El Mercurio y exhiben sus familias "ensabladas" manifestando "los hijos de ella, los míos y los nuestros". Las féminas líderes se refieren -en medio de risitas histeriodes- a las "trabajadoras sexuales" y no a las prostitutas. En general, creen que tales "pilatunadas" o boutade le devuelve jinetas de "revolucionari0s". Omisión grave: se debe anotar también "revolucionariAs".
 
La "nouvele gauche" -ayer castrocomunista o guevarienta- posee como experiencias gubernativas exitosa Chile con la Concertación. Elogiar a Fidel Castro en contraposición a la "progreizquierda" no corresponde. Tampoco referirse al ALBA y a regímenes tipo Evo, Correa, Ortega. Son experiencias motivadoras de otros análisis. Regresando al tema agréguese esa izquierda lúdica es eurocéntrica. Compite en ello con la derecha que, desde la fundacion de la república, promueve un delirante imitacionismo. Peor que eso, profundiza, en la ciudadanía, el convencimiento que Chile es una colectividad "distinta, distante y superior" a las patrias del entorno. Estas envidian a Chile si pasa por momentos de prosperidad o lo desprecian si padece pellejerías, en suma, del engreimiento al rencor. Ello para justificar sofisticado equipamiento bélico para la guerra que juzgan, en el mejor estilo israelí, ineludible. El titular de la Cartera de Defensa muy "suelto de cuerpo" expresa "hoy disponemos de las mejores FFAA de los últimos 100 años". No hay diferencias entre esta geopolítica que más bien es paranoia manejada por esos izquierdistas light y la vieja derecha que controla el agro, la banca, la prensa, la bolsa, las Universidades privadas. Ahora para que el calco sea completo se adscriben al modelo maorí de Nueva Zelanda, imitan a Zapatero en promover el matrimonio entre homosexuales según el modelo español, simpatizan con el  libre expendio de estupefacientes según el modelo holandés, juzgan democrática la permisividad en la escuela según el modelo estadounidense, suma y sigue... Indigenismo, eutanasia,  aborto,  divorcio, fin de la censura en los medios y, por ende, luz verde a la pornografía, hijos denunciando a padres a la policía por maltrato, abolición de la pena capital.. son temas de un discurso amamantado en el relativismo ético. Se trata de calco de tópicos foráneos o sugerencias de ONGs con sede en Estolcolmo, Londres o Nueva York.
 
Esta es la izquierda aceptada -y hasta aplaudida- por el establishment. Comparte el poder con la plutocracia. No sólo el poder, sino también los negocios como, por ejemplo, las comisiones derivadas de la adquisición de pertrechos.  Su tienda política eje es el PS cuya afiliación -entre gallos y medianoche- a la II Internacional -Internacional Socialista- los acomoda con esos PPSS europeos que son la máscara académica del capitalismo voraz y del colonialismo descarado. La colectividad instrumental es el PPD -Partido por la Democracia- especie de Legión Extranjera de una ralea variopinta cuyo  afán se centra exclusivamente en las elecciones para obtener concejalías, legislaturas y -si se puede- la Presidencia de la República. Son tan neoliberales como la derecha tanto así que su fundador Ricardo Lagos -hasta ayer- es la figura de mayor prestigio en el mundo empresarial y obvio en la Casa Blanca y el Pentágono. Esta izquierda juguetona -democrática dirán otros- es neoliberal y globalizante. Prefiere adosarse el marbete de "pragmática" y soslaya lo ideológico como "demodé". Aquello de "pragmático" lo concibe como administrar la realidad tal cual es sin ànimo de modificarla. El desdén por las ideologías es la máscara del cinismo. Por otro lado, no le mencionen al Tercer Mundo porque ahora lo estima tirillento, fétido y piojoso. Lo conveniente es acoplarse al Primer Mundo fragante, potente y millonario.  En Argentina sería lapidada como "cipaya", "balcanizadora" y "vendepatria". ¿Acaso hemos olvidado la prontitud en despachar tropa a Haití? Silencio ante pretenciones de Gran Bretaña sobre la Antártica. Jamás una protesta por la presencia de soldados yanquis y europeos en Irak o Afganistán. De verdad tal "izquierda" es la derecha renovada. Tienen controlado el poder en Chile. No en vano el poeta Nicanor Parra expresa: "¡La derecha y la izquierda unidas, jamás serán vencidas!". 

 

 

EL  PRETEXTO...
 
Se denomina "pretexto", en una confrontación, a  cierta facilidad que, a título gratuito,  brinda el contrincante a su adversario. Este -si es hábil- la utiliza de inmediato para potenciar el ataque. No confundamos esta suerte de error con el "diversionismo" que es una pseudo omisión o flaqueza que, de modo premeditado, se obsequia al enemigo para distraer sus fuerzas y contragolpearlo. La torpeza de maniobra aludida es  motivo que permite al enemigo reagruparse, mejorar la correlación de fuerza y hasta derrotar a quien es el antagonista.
 
En el pasado un  proceso revolucionario que se desmoronaba se decía que lo habían "guatemalizando". Quizás la expresión se origine en el derrumbe del  régimen de Jacobo Arbenz en Guatemala. Consiste en regalar "pretextos" a la "contra". Ello mediante arengas agresivas que ahuyentan a simpatizantes y empujan a neutrales a posturas opositoras. En eso - y uso la  expresión de Perón- son duchos "los apurados de siempre". La empleó el mismo día del triunfo de Pinochet para señalar a los que rebasan el programa inicial de la UP empujando a Allende al barranco.
 
En la publicidad de Evo y de Zelaya veo muy campante la figura  del Che. Se rumorea, cada vez con mayor documentación, por ejemplo, de acciones de Chávez en orden a la dávida de "pretextos". Uno, convertir las canchas de golf en terrenos para construir poblaciones destinada a indigentes.  Por cierto, el más frecuente es generar -y no esquivar- conflictos con la Iglesia. Se debe manifestar que Allende posee el mérito de cultivar óptimas relaciones con el Episcopado. No así Perón que -empujado por los "apurados de siempre"- tolera vejámenes a prelados y hasta profanación de templos en 1955.
 
El "pretexto" definido al comenzar esta nota se denomina también "provocación". Conducir un proceso de cambio de arcaicas estructuras que poseen hondas raíces hasta en la cultura exige un manejo muy cauteloso. La gradualidad es denostada como filiación "girondina". Sin embargo, el "jacobinismo" desemboca en el 18 de Brumario. Lo sabemos -hasta la saciedad- los chilenos... Aun no podemos salir a flote del abismo en que nos sumergen los fabricantes de "pretextos", es decir, nuestros "guatemalizadores". ¡Ojo! son los primeros en huir el 11 de septiembre de 1973.