EL RODILLAZO DE EVO
Andrés Solíz Rada | Publicado el 01/10/2010

El rodillazo (allí dónde más duele) que el Presidente Evo Morales propinó en días pasados a un ocasional adversario en un encuentro de fútbol lastimó  a los bolivianos como si todos hubiéramos sido víctimas de tan alevosa agresión. Y de la misma manera que Evo merece elogios por las transformaciones culturales de su gestión,  por su defensa de la ecología  o por su condena al imperialismo y la Banca Internacional, también debe ser censurado por la corrupción e inoperancia en el sector hidrocarburos, la sumisión a Chile y Brasil en política exterior o por los innecesarios ataques a gobernantes de la región.